
Muebles de tela: sofás y sillas.
A menudo se pueden encontrar varios alérgenos en muebles de tela y almohadas. Si hay un perro o un gato en la casa, encontrará mucho pelo de animal en las sillas y sofás. No solo porque una mascota a menudo se sienta en esto; los pelos de los animales pueden adherirse más fácilmente a la tela que a las superficies lisas.
Puede ser una buena idea aspirar y limpiar a fondo el sofá de vez en cuando para evitar que se convierta en una fuente de alérgenos. No olvides los espacios entre los cojines.
¿Qué puedes hacer?
- Aspira bien el sofá
- Batir almohadas y alfombras
- Limpia tu sofá regularmente con soda